Jaime Pe’ez
Más allá de mi biografía… comparto mi proceso artístico.

Jaime Pe’ez nació en México de padre y madre guatemaltecos. El nombre “Pe’ez” se desprende al contraer los apellidos de ambos padres (Pérez López) como una manera de honrrarlos por haberle brindado, sin ellos saberlo, la materia inspiradora con la que él transforma, con forma y figura, las vicisitudes de la vida.

Para Pe’ez, la pintura es ese espacio donde experimenta una posibilidad distinta de ser y fluir como “pez en el agua” dentro de este mundo. Dibujar era algo que no estaba en sus recuerdos, pero hubo alguien que le recordó que a sus 3 ó 4 años de edad, fue su juego favorito, un juego que luego se vio suspendido, y que posteriormente retomó como una actividad de expresión de sí, artísticamente. 

Pe’ez visualiza la pintura como algo que se mueve, que crece, que se transforma a través del tiempo. Lo pintado lo reconoce, antes que todo, como algo cautivo que exige un lugar, atención, expresión. Como tal, los gestos que se despliegan mediante la pintura dan cuenta de su condición viviente, como si fuera el rastro de otro. 

El quehacer con la pintura es para Pe’ez un modo de reencontrarse con aquellos momentos y elementos constitutivos de su ser. Para él, la pintura es una manera de escritura que inicia con la interacción de dos condiciones necesarias: tener una idea y no saber en qué terminará. Una vez plasmada la pintura sobre el lienzo, él, con otros ojos, vuelve a ella para leer y captar ese decir oculto allí, para despegarse de ella, dejarla fluir, dejarla ir… a inspirar a cualquiera que quiera.

Para que sus obras vean la luz, Pe’ez ha optado por exponerlas en espacios públicos y privados, organizando tertulias de arte personalizadas de manera grupal e individual. De esta manera, su obra artística pasa de ser algo íntimo y particular para convertirse en un algo que motiva a los demás a iniciarse en algún quehacer artístico, a realizar otra vez tal o cual actividad suspendida, o a contemplar al arte de maneras distintas, inesperadas, infinitas.